El mantenimiento en cierres de los 7,70 euros es, desde el punto de vista chartista, lo único que separa al BBVA de iniciar el viaje que le lleve camino de encontrarse con esa línea roja que sirve de suelo al canal bajista del mismo color, por la zona de los 6 euros.
No es que tenga que conseguir obligatoriamente dicho objetivo; pero, perdidos esos 7,70 euros, no habría ya más referencias gráficas de entidad que pudieran evitar ese viaje a la baja. Bueno, realmente sí habría una referencia menor, la que cotiza en la zona de los 7 euros y que fueran los mínimos de junio.
Por arriba, la superación de los 8,45 euros en precios de cierre constituye la primera resistencia a batir. Si bien este bajismo ha dejado todo un reguero de resistencias, las cuales constituirán, llegado el momento, un verdadero campo minado para la recuperación alcista, ciframos las siguientes y más significativas en la superación en cierres de los 9,25 y 9,75 euros.
No es noticia decir que el banco no presenta buen aspecto técnico, pero es lo que hay. A las horas que escribimos este análisis anda la cotización tanteando esa zona de soporte de los 7,70 euros. Esperemos a ver cómo acaba la cosa.