Comienza una semana especialmente interesante para la bolsa española y para no pocos de sus valores. Sí, ya sé qué están pensando. Todas las semanas resultan interesantes para aquéllos que se dedican a escribir sobre esto de la bolsa. Pero no se equivoquen, esta vez no hay trampa ni cartón, no pretendemos captar su atención gratuitamente. Atiendan a los argumentos que siguen, que, aunque no son todos, sí son suficientes, y entenderán los motivos para titular así este comienzo de la semana bursátil.
Estaremos especialmente atentos a dos valores sobre los que ya incidíamos la semana pasada. Telefónica e Iberdrola, tanto en la serie diaria como en la semanal que ahora presentamos, dejaron en la última vela semanal sendos toques a sus directrices alcistas de medio plazo, representadas por esas líneas verdes que marcamos en las gráficas adjuntas.
Ciertamente, queda mucha pintura por derramar de aquí al viernes sobre esa prometedora vela semanal que hoy comienza, aunque los que se dejaran llevar por las irresistibles tentaciones que los blue chips nacionales nos produjeron hace unos días ya estarán diciendo aquello de que la vela que va delante es la que alumbra, nunca mejor dicho.
No pierdan de vista a Acciona. Tuvo su lunes prometedor a finales de febrero y las sensaciones que entonces nos daba el título se han concretado con creces. En esta semana que entra tendrá que enfrentar la resistencia que debería suponer esa línea azul que marcamos en la gráfica.
El precio se movió durante algunos meses en el seno de ese canal lateral que conformaban las líneas azules y ahora el soporte que significaba la línea azul inferior bien pudiera actuar como resistencia, una de las últimas que quedan antes de enfrentar la gran barrera que cotiza en la zona de los 100 euros. En cualquier caso, el aspecto técnico es más que prometedor a día de hoy.
Que las buenas sensaciones que estos títulos, y otros que vayamos analizando, nos lanzan se acaben concretando dependerá en buena medida de la capacidad del Ibex 35 para reconstituirse al alza. La vela de onda alta dejada por el índice patrio la semana pasada, justo en la zona de soporte que marcamos en la gráfica semanal adjunta, con volumen apreciablemente alto, bien pudiera estar marcando un punto de inflexión en la corrección iniciada a mediados de febrero. Este tipo de velas suelen señalar, además de un notorio equilibrio de fuerzas en la zona de precio que delimita su pequeño cuerpo real, un suelo o un techo, según sea el sentido de la tendencia previa.
Por supuesto, no es la vela de onda alta una pauta que por sí sola pueda empujarnos a sacar conclusiones técnicas. Necesita en todo caso de una confirmación en velas posteriores. Otra razón, pues, para comprender lo determinante que puede resultar la semana que hoy comienza.
Eso sí, antes y en el muy corto plazo, el Ibex deberá mostrarse capaz de superar de forma solvente y en cierres la zona de los 10.600 puntos. Esa línea azul que marcamos en la serie intradiaria del cfd sobre el índice fue soporte durante algo más de un mes y ahora, una vez cruzado a la baja, actuará como resistencia para futuras recuperaciones. De hecho, a las horas que escribimos este artículo, a escasa media hora para el cierre de Wall Street, puede verse la dura pugna que se libra en esa trinchera.
Seguiremos los acontecimientos.
