Si la aprobación del enésimo rescate de Grecia posibilitó no hace mucho que el Ibex 35 rebotara desde la base del canal bajista en el que se mueve la cotización a lo largo de este año 2011, las dudas que ahora se ciernen sobre Portugal no sólo han impedido que nuestro índice director llegara del tirón hacia el techo de ese canal bajista, sino que han posibilitado un considerable retroceso.
Técnicamente, ese retroceso se ha producido justo en la zona de resistencia horizontal que cotiza en la banda de precio que va de los 10.500 a los 10.600 puntos (representada en el gráfico adjunto por esos círculos amarillos).
Los pesimistas querrán ver en este paso atrás el inicio de un nuevo viaje hacia la base del canal que definen las líneas rojas. Los optimistas, que tienen de su lado la positiva reacción vista en Wall Street estas últimas sesiones, ya estarán pensando que este retroceso está sirviendo para dibujar el hombro derecho de una pauta de vuelta alcista en formación.
Esa pauta, a día de hoy una entelequia, tendría su línea clavicular en la zona indicada de los 10.600 puntos, y sólo con su superación en próximas jornadas podría entenderse cumplida. Las proyecciones de ese eventual hombro-cabeza-hombro invertido para el precio, llegado el caso, estarían más allá del techo del canal bajista de líneas rojas y cotizarían en la zona que marca la línea naranja de la gráfica.
Pura elucubración, lo sabemos, pero una parte nada despreciable del análisis técnico consiste precisamente en barajar hipótesis de este tipo y así estar preparado para actuar en consecuencia una vez cumplidas las premisas necesarias.
Seguiremos los acontecimientos.
