¿Existe un banco en el mercado español con buen aspecto técnico? ¿Habita entre nosotros un componente del castigado sector financiero cuya gráfica nos invite a las compras? Pues sí, señores, esta rara avis existe y tiene por nombre CaixaBank.
Desde que el título hiciera algo parecido a un doble suelo en la zona de los 3 euros entre septiembre y octubre del año pasado, el precio describe una perfecta directriz alcista, que no es poco si lo comparamos con otros destacados miembros del selecto club de bancos integrantes del Ibex 35. Esa directriz sirve además de suelo al canal que dibujamos con líneas azules en la gráfica adjunta y cuyo techo nos marca los objetivos de corto/medio plazo para una eventual operación compradora.
El buen aspecto técnico es indudable, y lo será aún más cuando esa bajista de muy corto plazo (línea naranja en la serie) sea superada en cierres, lo que bien pudiera ocurrir mañana mismo.
Tenemos, pues, a la tendencia de medio plazo de nuestro lado, si es que nos animamos con las compras. Faltaría saber si estamos en el momento adecuado para la apertura de una posición compradora, y nuestra opinión al respecto es igualmente afirmativa. La cercanía al suelo de ese canal alcista parece indicarnos que estamos en un momento que ofrece una adecuada relación riesgo-rentabilidad.
Estamos convencidos de que la mayor parte de nuestros lectores entienden perfectamente de qué hablamos cuando usamos la expresión adecuada relación riesgo-rentabilidad. Aun así, nos vamos a permitir una explicación algo más detallada, aprovechando además para incluir con ello en el análisis la tercera pata que toda estrategia de trading debe tener: el soporte fiable y cercano.
La ecuación riesgo asumido-rentabilidad esperada es, como su propio nombre indica, aquella situación en la que el precio de apertura de una operación bursátil (el precio al que compramos) está lo suficientemente cerca del soporte que nos va a servir como stop de protección (precio de cierre de la operación si el sentido de los precios no es el esperado) y lo suficientemente alejado de la zona de precio que establecemos a priori como objetivo para la cotización, de suerte que la cuantía de la ganancia esperada compensa con creces el riesgo que se asume para el caso de equivocarnos.
No sé si me he explicado muy bien. Quizá con números, aplicados al valor que nos ocupa, todo se vea más claro. Entendemos que CaixaBank merece la apertura de una operación compradora una vez que sea superada en cierres la bajista naranja que hemos mencionado más arriba, estableciendo como stop de protección la pérdida en cierres de los 3,70 euros (esa zona ha servido de soporte estos dos últimos meses), y con objetivo en el techo del canal que describen las líneas azules, o bien en la zona de los 4,50 euros (línea negra en la gráfica).
Por el camino, eso sí, permaneceremos vigilantes, sobre todo cuando la cotización se adentre en la banda de precio que va de los 4,05 a los 4,20 euros (banda amarilla). Un hueco bajista dejado a finales de julio pasado dejó por ahí una resistencia horizontal que debe ser tenida en cuenta.
Seguiremos los acontecimientos.