Se abre la semana en los dos grandes bancos nacionales y las cosas siguen más o menos igual que en el análisis que no hace mucho dedicábamos a los bluechips nacionales en el corto plazo.
El Santander respeta escrupulosamente el suelo del canal alcista que definen las líneas azules, pero no encuentra las fuerzas necesarias para atacar la resistencia de los 6,21 euros (banda amarilla), ni la más inmediata que supone la bajista roja que marcamos.
Mientras se mantenga la desgana para bajar y la falta de fuerzas para subir, pueden esperarse rupturas de líneas carentes de toda virtualidad, al producirse de forma lateral. Eso es precisamente lo que ha ocurrido con la bajista roja que marcamos en la gráfica de BBVA. Los inmediatísimos 6,20 euros (línea naranja) primero y los 6,42 euros (banda amarilla) después aguardan a los alcistas y serán la auténtica medida de sus posibilidades en el corto plazo. La directriz alcista se ha mantenido a duras penas, ayudada por el nivel de soporte horizontal que cotiza en los 6 euros.
Seguiremos los acontecimientos.