Decíamos esta mañana, a propósito del PSI 20 portugués, que era mejor esta indecisión que vivimos las últimas jornadas que no el ver el dibujo de una vela decididamente bajista. Esta versión bursátil del virgencita, ¡que me quede como estoy! tiene su reflejo en las gráficas de los dos grandes bancos españoles.
Los martillos dibujados ayer, en el caso del Santander en la zona de confluencia de soportes que suponía la directriz alcista y el nivel de los 5,65 euros, no han dado paso hoy a un decidido rebote alcista. Si a primera hora se vio una ligera animación compradora, cuando escribimos este análisis la cosa aparece bastante calmada. El martillo de ayer da hoy paso a una vela que refleja bastante indecisión y equilibrio de fuerzas en esta zona de precio.
No hay fuerzas para rebotar, pero tampoco excesivas ganas de seguir bajando y perder esos soportes relevantes en el corto plazo que ayer se enfrentaron.
Poco más que decir, excepto dejar constancia de cómo el BBVA presenta un aspecto ligeramente mejor que el Santander en el muy corto plazo.