Desde que en octubre del año pasado el valor se cayera en vertical, con volumen alto y dejando una serie de huecos bajistas, tiene el precio un ajuste de cuentas pendiente. Y no es otro que el de testar esas resistencias dejadas en aquel desplome, bien haciéndolas buenas (fallo al intentar superarlas) o bien superándolas, demostrando con ello que el mercado ha cambiado de opinión.
Desde nuestro punto de vista, esa banda amarilla que marcamos en el gráfico de más abajo debería ser el nivel al que el precio tendiera en el medio plazo, aunque antes tenga que batir toda esa serie de resistencias menores que marcamos: líneas naranja, azul y roja. De momento, se ve dinero entrando en el valor, que no es poco.
Por otra parte, el valor nos ha alegrado este día festivo que hemos tenido: siempre reconforta ver cómo un valor sobre el que ayer lanzamos una alerta de compra ha acabado siendo la estrella del Ibex. Así son las cosas, unas veces se acierta y otras no. Lo importante es gestionar el asunto de forma que los errores no nublen nuestros aciertos.