Una vez que la resistencia dinámica que suponía esa directriz bajista nacida en septiembre del año pasado ha acabado por caer ante el empuje alcista, y centrándonos en lo que espera a nuestro índice director en el corto plazo, marcamos con bandas amarillas en el gráfico los niveles horizontales de soporte y resistencia.
Por abajo, los 8.890 puntos primero y los 8.655 puntos después suponen los soportes más inmediatos. Por arriba, los inmediatos 9.200 puntos son la primera barrera en cierres para la cotización. Más arriba aún, los 9.380 y los 9.570 puntos constituyen los sucesivos niveles a batir.
