Durante algún tiempo, el mismo pintor marcó los trazos del dibujo gráfico de Santander y Banesto. Sin embargo, por razones que seguramente podrán ser explicadas con sesudos argumentos de tipo fundamental, hace ya algo más de un mes que los caminos de ambas series se bifurcaron. Mientras el Santander se encuentra a tiro de piedra de sus máximos históricos, Banesto se viene moviendo en una banda lateral entre los 11,35 y los 12,35 euros. Pero nada es eterno, y toda pauta lateral se merece la presunción de ser la antesala de un nuevo tramo alcista.
Una superación en cierres de los 12,35 euros podría ser motivo suficiente para dar por finalizado este período de consolidación y animarse con las compras en el valor en busca de los 13,50-14 euros. Caso de cumplirse la premisa sin marcar mínimos inferiores a los vistos hace un par de días, la estrategia compradora tendría su stop de protección cortoplacista en la pérdida en cierres de los 11,70 euros.
Para los más desconfiados, quizá convendría diferir las compras hasta ver cómo el precio supera esa línea verde superior, eliminando así la posibilidad de que el precio siga atrapado dentro de ese gran canal verde.