Se encuentra el Santander, como todo el mercado, sumido en el movimiento alcista iniciado en el pasado mes de julio. Más concretamente, nuestra visión de corto plazo del valor pasa por ese canal alcista que marcamos con líneas azules en nuestro gráfico de más abajo. Y, como siempre ocurre cuando un precio se encuentra en la parte central de un canal, la cosa pierde atractivo de cara a la operativa, siendo conveniente esperar a un acercamiento a una de las dos líneas que lo delimitan para actuar en consecuencia.
Marcamos una paralela a la línea roja superior como mera posibilidad, aunque la zona que verdaderamente constituye soporte para la cotización, además de la línea azul inferior, está en el mantenimiento en cierres de los 9,98 euros.