Las dos últimas sesiones de esta semana han servido para que la directriz alcista que guiaba al precio en el corto plazo acabe rompiéndose a la baja. Podemos decir que, finalmente, la batalla desarrollada estos últimos meses ha sido ganada por la resistencia ascendente que representa la línea roja (otra cuña, por cierto).
Así las cosas, toca ahora mirar hacia los inmediatos soportes horizontales de la cotización. Su mantenimiento o su pérdida serán los que determinen si esta pérdida de la directriz alcista irá a mayores.
Ciframos esos soportes en el mantenimiento en cierres del nivel de los 14 euros primero y de los 13,60 después.