El Nikkei japonés no ha querido esta noche quedarse fuera de la fiesta alcista vivida ayer en los mercados y ha cerrado con alzas cercanas al 2 por ciento, dejando además otro de esos innumerables huecos que jalonan su gráfica diaria.
Aun así, y tal y como se observa en el gráfico que ahora traemos, el índice tiene un par de cuestiones pendientes no carentes de relevancia técnica: la primera, atacar y vencer la directriz bajista que marcamos con línea roja; la segunda, superar los últimos máximos relativos dejados a finales de agosto.
La serie destila cierta debilidad de la bolsa japonesa respecto a los mercados en general, y aún no vemos clara desde aquí la oportunidad de abrir posiciones largas en este índice.
