Corría mediados de septiembre, el precio tenía a tiro de piedra esa resistencia horizontal que representaba la línea naranja, el mercado en general andaba animado; parecía muy posible una ruptura al alza y, sin embargo, el precio dejó una fea envolvente bajista en zona de resistencia, seguida de un hueco a la baja.
Lo que vino después aparece suficientemente plasmado en nuestro gráfico: sucesivos huecos bajistas que han dejado un rosario de resistencias para un futuro y un canal bajista que guía a la cotización de forma ordenada y, por supuesto, a la baja.
El último de los niveles que Gamesa se muestra incapaz de superar coincide con los 13 euros en cierres. Varios intentos fallidos han determinado que el precio acabe buscando niveles inferiores.
¿Dónde parará esta sangría? Ni idea, no somos adivinos, somos analistas. Y como analistas, lo mejor que ahora podemos hacer es fijar niveles de soporte sucesivos. Seguramente alguno de ellos servirá como reconstituyente alcista. Y seguro que tendremos tiempo de darnos cuenta de ello y dejar constancia por aquí.
En los 12,25 euros cotiza el soporte horizontal más cercano. Si se pierden esos mínimos de julio, los 11,80, 11,60 y 11,15 euros son los niveles sucesivos de soporte horizontal.
