La tendencia bajista de corto plazo iniciada por el euro en su cambio respecto a la libra esterlina desde mediados de octubre sigue plenamente vigente. El euro se encuentra alejado de la directriz bajista principal (línea roja en nuestro gráfico) y se muestra incapaz ahora mismo, en tiempo real, para acometer y superar la bajista de más corto plazo (línea naranja).
Así las cosas, vamos a vigilar esa línea azul que cotiza en la zona de las 0,8910-0,8920 libras. Hasta ahora ha servido para frenar las caídas, pero se muestra impotente como resorte que invierta la tendencia bajista. Los rebotes desde la misma o desde sus proximidades son cada vez más débiles.
Nuestra hoja de ruta pasa por una pérdida de esa zona que hemos mencionado en las 0,8910 libras, evento que daría paso posiblemente a un nuevo tramo a la baja de cierto calado. Oportunidad para abrir cortos en el par, caso de que nuestra hipótesis llegue a producirse.
