Poníamos a Mecalux hace un par de días en el punto de mira, justo cuando estaba cruzando al alza en tiempo real esa línea roja de nuestro gráfico. El título marcaba compra, a pesar de pertenecer a esa clase de valores cuya escasa liquidez no los hace de nuestro agrado.
Hoy conocemos que la compañía estudia una OPA de exclusión, y que además no parece dispuesta a pagar más de 15 euros por título excluído. No nos interesan hoy demasiado los aspectos técnicos del valor. Incluso ante estas situaciones somos de la opinión que casi siempre resulta más provechoso vender con la noticia y, si alguien se tiró al barro tras nuestro análisis, guardarse ese euro largo de ganancia por acción.
Hoy preferimos hacer una reflexión sobre otro tema. Parece ser que Mecalux cierra su explicación de esta mañana con esta frase: «comunicará de forma inmediata toda la información en relación con este tema que sea susceptible de ser difundida como Hecho Relevante«.
Vamos, que todavía no hay información oficial en la CNMV y ya conocemos que la compañía quiere autoexcluirse de la bolsa y que no va a pagar más de 15 euros por título. Y digo yo, ¿también van a informar al regulador de los extraños movimientos del día 23 de noviembre? Porque el gráfico y el volumen nos indican que alguien ya tenía esa información.
Lo hemos visto otras veces, movimientos extraños con volumen alto acaban en noticias como ésta. Después vendrá el tira y afloja sobre el precio, en el que el pequeño accionista será un convidado de piedra, y el hecho relevante en la CNMV. El problema es que lo verdaderamente relevante ya habrá ocurrido para entonces.
Cosas de la bolsa.
