La directriz alcista iniciada en el mes de julio, ésa que sirve de base al canal que delimitan las líneas azules de nuestro gráfico, ha servido una vez más como soporte para la cotización, haciendo rebotar al futuro sobre el S&P 500 de nuevo hacia la parte alta del lateral que define el muy corto plazo.
Si la tímida ruptura del lateral definido por el Dow Jones Transportes que anoche comentábamos es realmente buena, con lo que al índice americano le quedaría aproximadamente un diez por ciento de subida más o menos tranquila en el muy corto plazo, es de esperar que el resto de índices directores le sigan en la faena. Y en el caso que nos ocupa eso pasa por ver cómo la cotización rompe al alza la línea roja de forma solvente. Incluso, puestos a elucubrar, podríamos ver en próximas semanas al S&P 500 visitar esa parte alta del canal azul.
Pero no adelantemos acontecimientos, primero toca ver cómo cae la línea roja de nuestro gráfico. Después vendrá la parte alta del canal verde y más tarde ya se verá de qué son capaces los alcistas.
Seguiremos los acontecimientos.
