Lo que en el mercado español en general ha sido un acelerado desplome bajista, en Ebro Puleva se ha quedado en una pérdida lateral de la directriz alcista nacida en abril del año pasado y en una tendencia a la lateralidad suavemente bajista en el muy corto plazo. Esto, en el fondo, no es más que otro síntoma de fortaleza por parte del valor. Mientras otros se han despeñado, literalmente, el título que ahora nos ocupa se dedica, de momento, a sestear en esa zona de máximos.
El volumen no parece apostar por las caídas, aunque es nuestra obligación marcar los niveles cuya pérdida podría producir un empeoramiento del escenario técnico. El primero de los soportes relevantes que encontramos es justamente el que ha aguantado al precio en estos días difíciles, y que cotiza en el mantenimiento en cierres de los 13,65 euros. De caer esta cota, el siguiente punto de control alcista se encuentra en los 13,15 euros. Y, más abajo, en la zona de los 12,70 euros en precios de cierre se encuentra el nivel en el que nosotros situaríamos nuestro stop para posiciones que vengan compradas desde abajo.
Por arriba, la resistencia más inmediata se encuentra en la superación en cierres de los 14,10 euros. No es que con su cruce al alza entendamos que haya llegado el momento de comprar, ya que un poco más arriba se encuentra el techo de ese canal de líneas naranjas y siempre habría que valorar además, llegado el caso, el contexto general de mercado, pero sí sería, desde luego, una señal de debilidad bajista en el muy corto plazo.