Al igual que todo largo camino empieza con un primer paso, toda reconstitución alcista comienza con un simple rebote. Distinguir entre una y otro desde el principio mismo es algo sólo al alcance de los poseedores de la bola de cristal o de aquéllos que realizan estupendas faenas a toro pasado, vendiéndolas como si realmente se hubieran producido. Nosotros, más metódicos y menos espectaculares, nos conformamos con marcar los niveles cuya superación entendemos como la frontera que diferencia una cosa de la otra.
En el caso del futuro del Dax, ese nivel consiste en la superación solvente de los 5.735 puntos, línea naranja del gráfico adjunto. Para el futuro del Eurostoxx 50, la frontera cotizaría en el cruce al alza de la zona de los 2.850 puntos. Cumplidas estas premisas, estaríamos dispuestos a reconsiderar nuestro escenario de mercado consistente en la continuidad del movimiento correctivo durante algún tiempo.
Pero ese camino tiene un primer paso en unos niveles inferiores que ahora mismo, en riguroso tiempo real, estarían atacando ambos índices. El cierre de los contados hace un rato ha dejado a ambos futuros a los pies de las resistencias que suponen la superación de los 2.730 puntos en el futuro del Eurostoxx 50 y los 5.595 puntos del futuro del Dax. Esas líneas marrones que marcamos en las series adjuntas tienen la clave de la continuidad del rebote en próximos días.
Seguiremos los acontecimientos.