En sólo dos sesiones hemos pasado de ver caer a los índices directores un diez por ciento en el intradía, o la totalidad de su valor en un minuto en algún valor, a contemplar estupefactos cómo nuestro Ibex 35 superaba ampliamente el 10 por ciento de revalorización en un día, o el 20 por ciento en alguno de sus valores directores.
El mercado siempre tiene sus razones para hacer lo que hace, incluso cuando éstas aparecen aún ocultas. Pero las razones se expresan en forma de tendencia, no cruzando a la baja y al alza los soportes y las resistencias como si tal cosa en un par de días, de forma alocada y sin solución de continuidad.
En momentos como éstos, no faltará quien haya obtenido jugosas plusvalías, vendiendo el miércoles y comprando el viernes. Pero, si las bajadas sí formaban parte del escenario posible (aunque no tan verticales), esta subida de hoy era del todo impredecible. Y, por eso, conviene no confundir la casualidad rentable con la falta de método que ahora mismo domina los mercados en el muy corto plazo. En momentos como éstos, seguramente lo mejor es permanecer fuera del trading, esperar a que las aguas se tranquilicen, sea en el sentido que sea, y volver a operar entonces en función de la tendencia.
Poco más tenemos que añadir, se admiten opiniones. Lo que está fuera de toda duda es que todo esto que estamos viviendo es histórico, que no es poco.
Historia e histeria. Esto es jugarse literalmente los cuartos, te puede salir bien o mal, cara o cruz, poco de análisis-sistema y muchas narices….
Lo que si está claro es que si tratas de aplicar la metodología para tratar de sacar beneficios, lo más probable es que pasmes la pasta, velas de más de 100 puntos en 5 minutos y sombras en sentido contrario por las mismas cantidades.
«Tios» que aprietan un «botón» y nos llevan a los infiernos y luego nos suben al cielo.
Si, que está difícil la operativa.
Pude ver en directo como la bolsa caía el 11-S antes del segundo choque…
El comentario: ¡ha pasado algo grave en el mundo! al minuto siguiente chocaba el segundo avión.
Lo de ayer ha sido un choque… emocional. Como decimos por aquí, ¡p’abernos matao!
Sólo un pequeño comentario. Lo visto ayer no es nuevo. Si alguien puede que busque movimientos intradía de la crisis asiática de finales de los 90.
Ya no en Asia, en España se podía ver a Aceralia suspendida a los pocos minutos de empezar porque había subido un 15% (en aquellos momentos límite de movimiento permitido en un día) y antes de finalizar la sesión vuelta a suspender con una bajada del 15%.
Por cierto quien recuerde aquella crisis sabrá que fue también una crisis de divisas y que el resultado fue la burbuja tecnológica posterior.
Un saludo.