Ya decíamos en nuestro último análisis del valor que la rotura al alza de su particular directriz bajista de corto plazo abría la puerta a que el precio buscara la primera resistencia horizontal en la zona de los 4,60 euros. Por ahí cerca ha quedado la cosa.
El comportamiento del volumen en el corto plazo sigue estando a favor de la continuidad alcista. A día de hoy, no hay síntomas de preocupación para los que vengan comprados desde abajo, así que sigue tocando mirar hacia arriba, justo a esas resistencias que cotizan sucesivamente en los 4,60, 4,80 y 5 euros.