Cuando el dinero se decide a salir de un valor, no hay soporte que le pare. Este tipo de situaciones, de las que estos últimos años hemos tenido buena muestra, se dan en todos los horizontes temporales. En el caso de Mapfre, ciñéndonos al corto plazo, vemos en el gráfico adjunto cómo la cotización ha traspasado todas las líneas que se ha encontrado por el camino desde que marcara máximos el día 26 de octubre.
Primero cayó esa directriz alcista, luego la zona de soporte horizontal en los 3,09 euros, y hoy, a estas horas, se está escenificando la pérdida de la zona de los 2,90 euros.
Falta ver el cierre de esta tarde, pero el deterioro del aspecto técnico es ya indudable, el volumen acompaña a la caída y la endiablada aceleración de esa directriz bajista roja da buena prueba de ello. Así las cosas, mejor estar fuera y esperar acontecimientos.
