Para quien ande en estos momentos largo en el Dax de poco puede servir que le digamos que, aunque el índice alemán perdiera cerca de 300 puntos, el escenario técnico no dejaría de ser alcista. Una catástrofe como ésa no es nunca aceptable para un trader cortoplacista en derivados.
Quien ahora mismo ande largo en el Dax estará más bien pendiente del desenlace final del encuentro que se está produciendo entre la cotización y la directriz alcista nacida a principios de agosto (línea verde en la gráfica). Es cierto que seguiría siendo alcista si en el futuro inmediato se dirige camino de la directriz que marcamos con línea azul, pero eso queda ahora un poco lejos.
Lleva el Dax casi un mes mareando la perdiz, expresión poco chartista que define en cambio bastante bien lo que viene pasando en esa elipse superior que marcamos en la serie. Otro tanto hizo hace semanas y entonces el desenlace fue el de dar paso a un nuevo movimiento vertical al alza. ¿Se resolverá ahora la cuestión de la misma manera o tocará reencontrarse con el alcismo más calmado que representa esa directriz azul?
Seguiremos los acontecimientos.
Aguanta sobre la directriz. Los alcistas se defienden con uñas y dientes.