La espectacular caída que en pocos días ha llevado al oro desde la zona de los 1.225 dólares a la de los 1.075, sin encontrar siquiera un punto en el que descansar, parece ir necesitando de un merecido reposo. Y como siempre ocurre, estas cosas, caso de acabar ocurriendo, pueden ser aprovechadas en la operativa.
Si el oro es capaz de cruzar al alza esas líneas roja y naranja de nuestro gráfico intradiario, la línea azul en el nivel de los 1.140 dólares bien pudiera ser el destino inmediato para la cotización.
No es que estemos adelantando un cambio de la tendencia de corto plazo, bajista sin matices, pero creemos que puede producirse un lógico movimiento correctivo aprovechable en el lado largo. Eso sí, primero toca ver al oro cotizar por el nivel de los 1.115 dólares, no vaya a ser que el descanso decidan procurárselo algunos dólares más abajo.
Seguiremos los acontecimientos.