Empezó siendo un rumor y ya se había convertido en un secreto a voces: BBVA tendría que llevar a cabo una ampliación de capital para adquirir ese banco turco detrás del que andaba. La verdad es que, aunque conocida de antemano, la noticia ha causado cierto revuelo esta mañana, dando solvencia a lo que ayer no era más que una tímida ruptura del soporte que cotizaba en los 9,20 euros (línea verde del gráfico).
Haciendo uso de un viejo dicho bursátil, y acomodándolo a la situación que nos ocupa, nos planteamos esta mañana si, tras las ventas producidas con el rumor, merece la pena comprar con la noticia.
Técnicamente, hay que retorcer bastante el análisis para encontrar argumentos que puedan sostener las compras en este momento, y en todo caso se trataría de compras oportunistas de trading cortoplacista con sotps ceñidos.
De hecho, el único motivo que pudiera ahora mismo hacer que un operador tomara la decisión de jugarse unos euros en el valor en el lado largo pasa por entender que estamos asistiendo al nacimiento de una gran directriz alcista, ésa línea azul que marcamos en el gráfico y que uniría los mínimos de marzo de 2009 con los de junio de este año.
En definitiva, carencia absoluta a día de hoy de motivos para las compras medioplacistas y argumentos algo forzados en el corto plazo para, si no comprar, sí al menos vigilar el comportamiento del título en esa zona en la que se encuentra.
Para lo que resta de sesión, la zona de los 9,10-9,15 euros constituye la primera resistencia horizontal que los alcistas deberán enfrentar en precios de cierre. Por ahí ha dejado el hueco de apertura de hoy una barrera que franquear.