Si las caídas iniciadas en el título con los máximos de abril del año pasado han de dibujar una nueva onda al alza (lo que en modo alguno equivale a un cambio de tendencia de bajista a alcista), ahora es un buen momento para hacerlo.
La conjunción del suelo de ese canal bajista en el que la cotización se ve sumida desde el citado abril y el soporte horizontal que habita en el respeto en cierres semanales de la zona de los 27,25 euros conforman una alianza que bien pudiera frenar las caídas e impulsar de nuevo al precio camino del techo del canal bajista.
No cambiaría por ello la tendencia en el título, ya lo hemos dicho, pero hablamos de un eventual recorrido de subida de unos cuatro euros, que no es poco.
En cualquier caso, las velas semanales aún no apuntan a ese rebote. De hecho, Bolsas y Mercados no ha dibujado las esperanzadoras velas que sí se han visto en multitud de valores la semana pasada.
Si las ventas provocan en el futuro inmediato una pérdida de ese soporte de los 27,25 euros, el precio no encontraría una referencia fiable en gráfica semanal hasta la zona de los 21,60 euros, y eso es mucha caída para quedarse dentro.
Seguiremos los acontecimientos.
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