Ahora que parece que la libra está cogiendo fuerza en sus principales cruces, fijamos nuestra atención en el cambio de la moneda británica con el franco suizo.
La rotura al alza de la directriz bajista roja ha venido a coincidir con la confirmación de una típica pauta de vuelta alcista en forma de taza con asa. Dicha formación es la que viene dibujada por las velas situadas por debajo de la línea naranja, las mismas que han respetado el soporte que supone la directriz azul.
Así las cosas, podríamos concluir que la libra dio señal de largos en esta paridad hace un par de sesiones. Pero, estando tan cerca el nivel horizontal de los 1,75, otrora soporte y ahora más que posible resistencia, preferiría recomendar los largos después de ver cómo sale la libra del encuentro con esa línea verde. Quizá el primer toque sirva para dibujar un pull back a las resistencias superadas, momento en el que podríamos subirnos al movimiento con algo más de seguridad.