Tienen ante ustedes la principal razón, si no la única, que posibilita que el índice Ibex 35 haya conseguido evitar la catástrofe estas últimas semanas. El imponente alcismo que la gráfica del Dow Jones Industrial presenta en el corto plazo, escenificado en esos canales que marcamos en el gráfico, es el único argumento que ha mantenido a los bajistas ligeramente agazapados en el mercado patrio.
Pero, aunque los 11.000 puntos que están a la vuelta de la esquina parecen el objetivo razonable para el movimiento al alza iniciado por el Dow Jones a comienzos de ferbrero, sabemos que todo exceso, por muy tendencial que sea, provoca su corrección proporcional, para asi preparar el camino al atracón siguiente.
No hay síntoma alguno de debilidad y la cadena de máximos y mínimos crecientes es inmaculada. Pero precisamente por eso, hemos empezado a engrasar la escopeta de los cortos. En algún momento, el mercado decidirá que los más de 1.000 puntos que se llevan recorridos al alza del tirón deben ser atemperados antes de seguir con la faena. Ése será el momento de cerrar los largos que por aquí recomendamos con el cruce al alza de los 10.325 y abrir unos cortos con stop cercano para dejarse llevar hasta donde el precio quiera que lleguemos.
Esperemos acontecimientos, adelantarse nunca trae nada bueno. Siempre hay que ir un euro por detrás para poder ganar otro más adelante.