Durante mucho tiempo Apple venía a significar, por ponderación, más del veinte por ciento del Nasdaq 100. Esta situación propició que el sector tecnológico fuera el auténtico abanderado de la recuperación bursátil vivida tras los mínimos de 2009, de suerte que el índice neoyorquino, de la mano del excelente comportamiento de la compañía de la manzana mordida, lograra superar en enero de este año los máximos de 2007, punto en el que se iniciara esta crisis que aún atenaza a multitud de mercados.
Si bien los reguladores estadounidenses decidieron no hace mucho limitar esa influencia de Apple sobre el índice, la mala lectura que se ha hecho estos últimos días de los resultados de la empresa californiana se ha dejado sentir en la serie del Nasdaq.
En la gráfica adjunta, que recoge la evolución del índice tecnológico a lo largo de este mes de octubre, puede verse el desarrollo de un típico proceso de progresiva inversión de la tendencia en el corto plazo. Las líneas azules que marcaban un alcismo ordenado dejaron paso a la línea verde, marcando con ello el inicio de un merecido descanso. Sin embargo, el reciente cruce a la baja de dicha línea y el dibujo de ese canal de líneas rojas denotan ya cierto control de la situación por parte de los bajistas, dicho sea en estrictos términos de muy corto plazo.
Veremos cómo van evolucionando los acontecimientos.
