Técnicamente, el futuro del S&P 500 ha tenido oportunidad esta mañana de poner a prueba una vez más la directriz alcista (línea azul oscuro inferior en nuestro gráfico) nacida en el mes de julio y que en el mes de noviembre tuvo ya ocasión de demostrar su valía como soporte dinámico para la cotización.
Nos encontramos, por tanto, en un eventual punto de giro al alza, momento en el que podrían ser propicios unos largos con stop cercano. En cualquier caso, el verdadero timón del muy corto plazo pasa por ese canal lateral que encierran las líneas horizontales de nuestro gráfico. Y es precisamente en la solución final que encuentre el precio respecto al mismo donde ciframos desde aquí la señal que de verdad pueda activar nuestra operativa en un sentido o en otro.
Seguiremos los acontecimientos.