Futuro del Dax y S&P 500, los alcistas no se arrugan

Pudiera pensarse que lo mucho que llevan subido estos índices y la cercanía a los techos de los canales que guían las cotizaciones  al alza en los últimos meses son motivos de peso para que los alcistas se tomen un merecido descanso. Pero no andan por la labor en aquellas tierras los que tanto echamos de menos por éstas.

Aun así, y aunque el precio podría estar durante un tiempo pegado a ese techo de los canales alcistas, conviene ajustar los stops de los largos que vengan desde abajo, ya que no sería de extrañar ver retrocesos hacia zonas de soporte, no para perder la tendencia alcista, sino para tomar fuerzas con las que dibujar nuevos tramos al alza.

Si bien es cierto que uno hace sus cábalas y que por aquí manejamos un eventual escenario correctivo en estos mercados alcistas previo a un nuevo impulso vigoroso hacia arriba, en lo que pudiera ser el rally de Navidad de este año, también lo es que esas elucubraciones no tienen mayor trascendencia en el trading cortoplacista puro y duro. Nos conformaríamos con ver retrocesos en el Dax hacia la zona de los 6.700-6-720 puntos y en el S&P 500 a la banda de los 1.210-1.200 para volver a poner a estos índices en el punto de mira de la operativa compradora.

Mientras la tendencia dure, hay que apostar a su favor. Ciertamente, nos movemos ahora en el terreno de la operativa que trata de arañar unos pocos puntos en cada estrategia. La hora de apostar con la mira telescópica ya pasó y en su momento por aquí dimos cuenta de ello. Ahora se trata de disparar casi a bocajarro. Si, finalmente, se cumple ese escenario que antes planteábamos y tenemos recaída previa al rally de fin de año, volveremos a desenfundar el rifle.

Seguiremos los acontecimientos.