Curiosamente, o quizá no, el Ibex 35 y sus valores directores han dejado también dibujadas en las dos últimas sesiones sendas velas amartilladas similares a las que esta tarde comentábamos a propósito del cambio Euro/Dólar. Si en el caso de las divisas, ello es motivo para poner al cambio en el punto de mira, en el caso de la bolsa española no creemos necesario que mañana andéis con las pestañas pegadas al monitor.
Aquí no estamos en soporte alguno, los soportes relevantes se perdieron recientemente y andamos un poco en terreno de nadie antes de volver a encontrar soportes relevantes que pudieran amortiguar las caídas. Una sesión no hace tendencia, y dos tampoco, sobre todo cuando las mismas se producen con escaso volumen.
Esas dos últimas velas diarias con sombras inferiores alargadas dibujadas por el Ibex, Telefónica, Santander y BBVA (lo que denota sendas recuperaciones intradiarias) obedecen más a un día de resaca, la primera, y a un día sin referencias al otro lado del Atlántico, como hoy ha sido el caso.
Habrá que esperar la semana que viene a ver cómo cotiza Wall Street los datos del Black Friday y esperar acontecimientos. No sería la primera vez que esta fiesta pagana en honor del dios Consumo sirve de excusa para dar inicio al rally alcista navideño, si es que esta año vendrán también a visitarnos, como el turrón, las alzas bursátiles por Navidad.
Técnicamente, como siempre hacemos, debemos objetivar los acontecimientos futuros y fijar los niveles cuya superación en precios de cierre constituiría la premisa necesaria para empezar a plantearnos al menos la posibilidad de un rebote de cierta consistencia en el mercado español. Los 17,75 euros de Telefónica, los 7,95 de BBVA, los 8,20 de Santander y, en definitiva, los 10.000 puntos del Ibex están marcados en nuestras gráficas de cabecera como las más inmediatas barreras a cruzar por los alcistas, constituyendo el primer paso de ese eventual rebote.
Estaremos atentos a la lucha en esas trincheras.