Aunque la volatilidad vivida últimamente en el mercado nos haya acostumbrado a ver cómo lo subido un día se perdía al siguiente, no por ello se debe dejar de perseverar en las conclusiones obtenidas tras el análisis. Ayer entendíamos que el valor había dado señal de entrada con la superación en cierres de los 16,80 euros, y hoy, incidiendo en esa idea, entendemos que la vela dejada (aunque fea) no ha sido más que un pull back con volumen a la baja a la resistencia superada.
Si bien los primeros stops fiables cotizan en los niveles que ayer se indicaban, una pérdida del soporte dinámico que supone esa directriz alcista azul podría ser interpretada por un cortoplacista como motivo suficiente para el cierre de cualquier posición compradora. Mientras eso no suceda, la hipótesis de continuidad de las subidas sigue siendo la que guía mi visión del valor.