Cuando en nuestro último análisis del valor mencionábamos que la señal de compra radicaba en la superación en cierres de los 50 euros, realmente estábamos redondeando el nivel de los 49,91 euros, donde los cuerpos reales de dos velas dejadas en el mes de noviembre marcaban la resistencia en cierres para la cotización.
Hoy el precio de cierre ha superado ese nivel por cuatro céntimos, lo que en un valor que cotiza a estos guarismos no da la suficiente solvencia para entender por activada la señal de entrada. La vela dejada el viernes pasado y el enorme volumen que la acompañó bien pudieran ser una señal de acumulación previa al escape alcista. Si el cierre de mañana y el volumen acaban por confirmar la solvencia de esta rotura, el techo de ese canal azul debería ser la referencia gráfica para el precio.