Cuando uno comenzaba en esto de la bolsa, siempre se decía que ningún movimiento era del todo fiable si los índices tecnológicos no lo abanderaban. Es algo así como trasladar la vieja teoría de Dow (a la que ya hemos dedicado por aquí algunas líneas), y la regla del movimiento unidireccional en todos los índices Dow Jones para concederle fiabilidad, a estos tiempos modernos en los que la tecnología lo invade todo.
Echando un vistazo a la composición que hoy traemos sobre los índices norteamericanos, comprobaréis cómo en ningún momento los Nasdaq han flaqueado en su tendencia alcista iniciada tras los mínimos de marzo, apoyándose de forma ordenada en el suelo de ese canal azul, que no es otra cosa que una solvente directriz alcista escrupulosamente respetada.
Si a ello le añadimos las pautas de velas dejadas en el Dow Jones Industrial y en el S&P 500 en estas tres últimas sesiones (pautas de vuelta alcista), que incluso en el caso de este último viene a coincidir con un apoyo en una zona de soporte horizontal de muy corto plazo, la verdad es que bien podríamos concluir que esta corrección (palabra aplicable sobre todo al caso del Dow Jones) toca a su fin, o que al menos necesita de un descanso que dé algo de alas al bando alcista.
En condiciones normales, todas estas ideas deberían ser recogidas a partir de mañana por los mercados europeos, por lo que podemos estar ante el punto óptimo para que los cortoplacistas se aventuren con las compras en valores nacionales alcistas o muy cercanos a soportes importantes. Si la idea resulta buena, la ecuación rentabilidad-riesgo (por el stop en los mínimos de estos días) es desde luego de las que incita a tirarse al barro.
Tendremos oportunidad de ir concretando la cuestión por valores, pero eso ya será otro día. Por hoy nos retiramos a nuestros aposentos.
Buenas tardes Antonio, ante todo agradecerte q