En mi opinión, sigue siendo el blue chip con mejor aspecto técnico de la bolsa española con mucha diferencia. Si bien el primer impulso bajista de comienzos de febrero fue acelerado y contundente, llevándose por delante esa inmaculada directriz alcista azul, ha conseguido eludir el dibujo de un segundo impulso a la baja, lo que por otra parte habría sido letal desde un punto de vista técnico, ya que con ello se habría confirmado una pauta bajista en forma de hombro-cabeza-hombro y se habría perdido la importante zona de soporte de los 41 euros (línea verde).
Desde un punto de vista cortoplacista, era especialmente atractivo para el trading comprador en las cercanías del mencionado soporte de los 41 euros. Incluso algún trader con ganas en el valor podría aprovechar ahora el nivel de los 43,30 euros en precios de cierre como stop para una posición compradora con objetivo en esa línea roja superior y más concretamente en la zona de los 46 euros. Puede parecer poco objetivo para algún lector, pero los que trabajen con derivados sabrán de qué estoy hablando.
Operadores del medio plazo deberían esperar a que el título consiguiera resolver al alza esa zona de los 46-46,50 euros antes de abrir posiciones compradoras. Y los que vengan comprados desde abajo poco deben temer mientras no se pierda en cierres semanales la zona de los 41 euros.