Ya venimos diciendo en nuestros análisis sobre el valor que, tras la pérdida de la base del canal que definen las líneas azules de nuestro gráfico, el aspecto técnico ha empeorado considerablemente. Este empeoramiento sólo podría darse por zanjado con la superación en cierres del nivel de los 0,2840 euros, lugar en el que un hueco bajista del 24 de noviembre ha dejado la más inmediata de las resistencias horizontales relevantes para la cotización.
Cierres por debajo de los 0,27 euros abrirían la puerta a un nuevo tramo bajista que podría llevar al precio, como mínimo, a la parte baja del canal rojo de nuestro gráfico. Puede parecer poca caída, pero en un valor en el que los céntimos tienen tanta importancia porcentual es una posibilidad que no debe despreciarse en absoluto.
Desde un punto de vista más tendencial y menos cortoplacista, la media de volumen girada a la baja parece indicar que estamos ante un gran movimiento correctivo de la subida iniciada a principios de año. Consecuencia de esta idea es el pensar que, en algún momento, el precio encontrará suelo y retornarán las subidas. El problema es que no saber salir a tiempo puede privarnos en su momento de la oportunidad de entrar más abajo, a precios más atractivos o con argumentos técnicos más sólidos. Nunca se insistirá bastante en el uso de los stop de protección, especialmente en valores como el que ahora nos ocupa.
