Toda regla tiene sus excepciones y la que proclama que los valores pertenecientes a un mismo sector acaban teniendo comportamientos similares no iba a ser menos. Mientras la multinacional española Indo ha solicitado recientemente el concurso de acreedores y su cotización anda sumida en el infernal camino de los cero euros, la francesa Essilor cotiza prácticamente en máximos históricos. ¿Cuestión de tamaño? ¿Consecuencia de una diferente forma de administrar la empresa? Desconocemos los motivos por los que la fabricación de lentes haya tenido resultados tan dispares a un lado y otro de los Pirineos, aunque estamos seguros de que los hay.
Lo cierto es que Essilor es uno de esos valores que nos atreveríamos a recomendar a alguien interesado en ir haciendo una cartera de medio plazo. El mercado mira con buenos ojos a la acción y, mientras el precio mantenga determinados niveles, lo lógico sería pensar que seguirá haciéndolo en el futuro.
Y, como quiera que estamos hablando de plazos de inversión más largos que los que habitualmente recomendamos por aquí, también el nivel de precio en el que marcar nuestro stop de protección estará más alejado de lo normal. Es ésta una ecuación que siempre debemos tener en cuenta: a mayor plazo de inversión, mayor distancia en el stop de protección respecto al precio de entrada. Colocar stops ajustados a estrategias de larga duración es, salvo excepciones, un error que suele pagarse caro.
Por supuesto, no estamos hablando de esa práctica equivocada de colocar los stops a determinada distancia porcentual del precio de entrada. Se trataría, por contra, de buscar soportes relevantes que sirvan como nivel de stop más alejados y acordes con la visión de medio/largo plazo que nos anima a abrir la estrategia en cuestión. Aunque hay zonas de precio relevantes antes, nuestra recomendación pasaría por cerrar posiciones compradoras sólo con la pérdida en cierres semanales de los 42,40 euros. Igualmente, y dado el estado actual de la serie, aconsejaríamos retrasar las compras hasta ver a la cotización superar en cierres de forma solvente la cota de los 50 euros.
