Los índices tecnológicos han sido, y todavía lo son en cierta forma, los que más hicieron creernos las bondades del rebote iniciado en marzo. Sin embargo, el doble techo dejado en los 2.550 puntos primero y la pérdida de la directriz alcista que guiaba todo el tramo al alza después, con su correspondiente pull back, han acabado por deteriorar el gráfico. Los sucesivos huecos alcistas dejados en la subida constituyen las líneas de defensa que el bando alcista puede colocar en el camino de las aguerridas tropas bajistas que han tomado el mando de las operaciones.
El primero de ellos ya cayó y justo en el límite inferior del segundo ha cerrado la fea vela dejada hoy. El tercero está ya demasiado cerca de los mínimos de marzo. Así las cosas, y por no dejar de hablar de huecos, el dejado a la baja el pasado jueves pasa por ser la trinchera que cualquier reacción alcista debiera atravesar para entender que la batalla no va a resultarle tan fácil a la armada bajista.