Los 8,70 euros por arriba y los 8 euros por abajo constituyen el rango en el que el precio se mueve estos últimos meses. Cada acercamiento a la parte baja de esa pauta rectangular será vista por los optimistas y por los amantes de comprar en soporte como una inmejorable oportunidad de largos cortoplacistas.
No seremos nosotros los que les quitemos las ilusiones y las razones, sobre todo porque en más de una ocasión cedemos a este tipo de tentaciones. Pero eso no impide que llamemos la atención sobre un aspecto técnico relevante: cada aproximación a esa cota de los 8 euros constituye además un momento especialmente delicado desde el punto de vista tendencial.
Si la cota de los 8 euros se perdiera solventemente en cierres diarios, no digamos en semanales, la situación técnica se resentiría apreciablemente. Esa apatía en la que se mueve el valor, y que coincide con el respeto del rango lateral antes expuesto, se convertiría en un decidido paso al frente, o mejor dicho, un paso hacia atrás.
Se perdería con ello el soporte horizontal de corto plazo y esa directriz alcista azul que marcamos en la serie adjunta. Los alrededores de los 7,20 euros (línea verde) pasarían a ser la referencia para el precio.
Vivimos, pues, momentos interesantes en el valor que mueve los hilos del mercado español.