El doble suelo dibujado por Santander en la zona de los 4 euros (línea negra en la gráfica adjunta), confirmado con la superación de esa línea azul que se marca, daba una proyección teórica para el precio (en escala logarítmica) en la zona de los 6,65 euros.
Si a principios de agosto esto podía suponer toda una entelequia, ahora que incluso se ha superado la directriz bajista que se marca en rojo, ese objetivo parece más que factible. Como todo objetivo teórico de una pauta chartista, no debe tomarse al pie de la letra. Puede ser que no se llegue por unos cuantos céntimos o que se sobrepase holgadamente, llevada la cotización por la inercia alcista.
Lo importante es ya comenzar a barajar si estamos ante algo más que una simple pauta de vuelta alcista en el corto plazo y, sobre todo, si ha llegado el momento de comenzar a ver en los gráficos un gran suelo de mercado que haya puesto punto y final a la tendencia bajista que atenaza al mercado bursátil español.
No es un análisis en tiempo real como éste el sitio más adecuado para esas cuestiones, aunque ya las dejamos apuntadas. Ahora lo que toca es dejar constancia de esa zona de resistencia (banda amarilla en la gráfica) horizontal en la que anda metido de lleno el Santander esta mañana. Quizá sea el último escollo serio antes de alcanzar los objetivos marcados por el doble suelo.
Seguiremos los acontecimientos.
