Lo hemos dicho ya otras veces, pero nunca está de sobra repetirlo: mientras el Santander no pierda en cierres el nivel de los 6,20 euros, la fortaleza alcista que el valor exhibe desde los mínimos de noviembre no dará síntoma alguno de debilidad. Precisamente en esa zona radica el primer nivel de soporte para el precio y para cualquier posición compradora de corto plazo en el valor. Un euro más abajo, en los 5,20 euros, cotiza el soporte cuyo mantenimiento diferencia en el medio plazo la creencia en una formación de suelo o, por contra, en la continuidad bajista.
Por arriba, los 6,90 euros constituyen en cierres la resistencia más inmediata. Los 7,20 euros y los 8,35 son sucesivas barreras para la cotización.