Una vez más, el mercado español coloca sobre los hombros de Santander y BBVA la pesada carga de tener que llevar el timón del Ibex en su intento de recuperación alcista. No sólo por su capitalización bursátil (entre los dos suman más del treinta por ciento del índice), sino también por el referente que suponen en cuanto que posiblemente sean los mejores exponentes de la marcha del país, lo cierto es que esta ruptura al alza de la zona de los 11.000 puntos por parte del Ibex 35 va a necesitar, para tener continuidad, de la necesaria aportación de los dos grandes bancos.
Técnicamente, los gráficos están donde pedíamos hace unas semanas que estuvieran. Cuando se produjo aquel rebote vertical desde zonas de soporte (líneas verdes en las gráficas adjuntas), establecíamos como escenario ideal el de asistir a un lógico retroceso, o al dibujo de una zona de consolidación, para poder entrar una vez se produjera el segundo impulso al alza.
Ese segundo impulso alcista, además de proporcionarnos un momento óptimo para entrar en el lado comprador, nos daría además la prueba de que lo visto en aquellas semanas de verticales subidas era algo más que un violento rebote.
Las series semanales, a falta de la última capa de pintura que mañana deberá dárseles con el cierre, esbozan ya ese segundo impulso al alza. ¿Vamos a dudar ahora que tenemos sobre la mesa lo que queríamos?
Yo creo que no. Creo que ha llegado el momento de comprar BBVA y Santander, con la vista puesta, como primer objetivo, en esas directrices bajistas primarias (líneas rojas).
Ni los valores que tratamos, ni el índice director de nuestra bolsa, han dejado de ser bajistas en términos de largo plazo. Los mercados verdaderamente alcistas, Alemania y Wall Street, tendrán que corregir adecuadamente en algún momento el impresionante movimiento al alza iniciado en septiembre del año pasado, con el riesgo de contagio que ello supone. Y, sin embargo, se me hace difícil no recomendar el que se aproveche una oportunidad como la que presentan Santander y BBVA.
Con stops iniciales de protección en la pérdida en cierres semanales de los mínimos de esta zona de congestión dibujada las últimas semanas (a saber, los 8,50 euros de Santander y los 8,65 de BBVA) y la vista puesta en los objetivos citados, y más allá llegado el caso, la ocasión merece la pena.
