En nuestro análisis del día 17 de octubre, cuando el par andaba por los 135 yenes, comentábamos que entendíamos producida la señal de largos. El objetivo que entonces marcábamos cotizaba en los alrededores de los 145 yenes, y en esa idea seguimos todavía.
Sin embargo, siempre conviene estar alerta y dispuesto a cerrar una posición con ganancias si los acontecimientos así lo aconsejan. No es que en el cambio haya motivos para dudar de nuestras creencias, pero conviene vigilar su comportamiento, pues se está enfrentando en estos momentos con esa directriz bajista que marcamos con línea roja en nuestro gráfico.
No dejaremos de seguir la evolución del par.