Como si de una película de suspense se tratara, los mercados se afanan en mantener la tensión que viven las series desde que se consiguiera poner freno a la caída en picado protagonizada este verano. Desde entonces, el guión habla del dibujo de zonas de consolidación en las que el precio se mueve entre los soportes y las resistencias, pero sin llegar a decidir el sentido del próximo golpe.
Curiosamente, el Ibex 35, actor secundario en esto de los mercados mundiales, se encuentra últimamente más cerca de la parte alta de ese rango, mientras que el actor protagonista, un guaperas que responde al nombre de S&P 500, anda más próximo al soporte de los 1.100-1.080 puntos.
Este mejor comportamiento relativo de nuestra bolsa en el muy corto plazo no deja de ser anecdótico y se nos hace difícil imaginar para esta película un final en el que el Ibex consiguiera romper al alza la zona de los 8.800 puntos, coincidiendo con un cruce a la baja por parte del S&P 500 de los 1.100. Por mucha imaginación que los guionistas quieran echarle al asunto, las cosas no suelen funcionar así.
Puestos a mirar el lado positivo de este argumento, la proximidad del índice neoyorquino a la zona de soporte podría posibilitar un inminente rebote en Wall Street, lo que sin duda ayudaría a que nuestro galán (Ibex 35) lograra cruzar esos 8.800 puntos y dirigirse camino de la siguiente barrera, la que cotiza en la zona de los 9.250 puntos (línea negra en la gráfica adjunta).
Estaremos atentos a la pantalla. No se distraigan demasiado con las palomitas.
Antonio:
Primero de todo, te seguimos siguiendo y aplaudiendo.
Segundo se repite el escenario del verano pasado lo que al revés. Hay divergencias importantes entre índices que se compensan por el efecto divisa. Y es que con el euro a 1,50 $, los paises periféricos europeos no pueden salir de la crisis.
Un saludo.
Un saludo para ti, Caemon.