El viernes, con un ligero incremento de volumen, los bajistas cruzaron a la baja sin demasiados remilgos la zona de triple soporte que marcábamos en nuestro anterior análisis del valor. En la sesión de hoy, auténtico lunes negro en la bolsa española, la faena no sólo ha sido sobradamente confirmada, sino que diríamos que los bajistas se han dedicado a rematar a los pocos alcistas que aún pudieran merodear por los alrededores.
Presumíamos, y así lo hicimos saber en su momento, que la resistencia que habitaba en la zona de los 6,65 euros (línea granate en el gráfico adjunto) no sería fácil de franquear. Pero nunca pudimos imaginar un desenlace de la situación como este. Hemos de reconocer, sin medias tintas, que esta caída fulminante nos ha cogido con el pie cambiado.
No entraba dentro de nuestro escenario para el corto plazo ni el ver revolotear a esos cuervos negros ni esa sucesión de huecos bajistas que denotan auténtico pánico vendedor. El mercado nunca dejará de sorprendernos.
Y precisamente en esa cadena de huecos bajistas que resaltamos en la serie es donde hay que marcar las resistencias que irán poniendo a prueba el rebote que se produzca uno de estos días. La primera cotiza en la superación en cierres de los 6,18 euros y constituye en estos difíciles momentos la referencia gráfica con mayúsculas. Más arriba esperarían los 6,40 y los comentados 6,65 euros.
Entre los 5,30 y los 5,40 euros se encuentra la zona de soporte que diferencia entre el bien y el mal en el medio plazo. Si esa zona se perdiera en próximos días, el movimiento al alza nacido el pasado verano podría darse por finiquitado. Todo habría sido un bonito sueño, cortado de raíz por estas salvajes caídas. Mientras esa zona aguante, cabe esperar que este pánico se acabe diluyendo y los alcistas retomen el control del mercado.
Seguiremos los acontecimientos.